Presidenta Castro Promete Fortalecer Diálogo Migratorio con EE.UU.
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, ha reiterado su compromiso de fortalecer el diálogo con los Estados Unidos sobre la migración, especialmente en el contexto de la reciente investidura de Donald Trump como presidente de EE.UU. por segundo mandato.
Compromiso con la Migración Ordenada
En un mensaje publicado en la red social “X”, la Presidenta Castro felicitó a Donald Trump por asumir la presidencia y expresó su disposición para abordar conjuntamente la migración de manera ordenada, segura y legal. Este enfoque busca promover el desarrollo económico y la seguridad en beneficio de ambas naciones[1][3].
“Confiamos en seguir consolidando nuestra histórica asociación, promoviendo el desarrollo económico y la seguridad en beneficio de ambas naciones”, destacó la mandataria hondureña. Este compromiso se alinea con las áreas de interés mutuo que incluyen migración, seguridad, economía e inversión[1].
Reuniones y Diálogo Bilateral
La presidenta Castro ha mantenido un diálogo activo con representantes de EE.UU. en varios frentes. Recientemente, se reunió con una delegación de congresistas estadounidenses en Tegucigalpa para discutir temas clave de la agenda bilateral, incluyendo migración, medioambiente, derechos humanos y comercio. Esta reunión fue descrita como “muy fructífera” por el canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina[2].
Durante estas reuniones, se han abordado temas específicos como el avance de las políticas del gobierno hondureño, el proceso de investigación sobre el asesinato del ambientalista Juan López, y los avances en el cumplimiento de sentencias internacionales a favor de comunidades garífunas en el Caribe de Honduras. La congresista demócrata Delia Ramírez calificó las conversaciones como “muy francas” y abogó por una Honduras donde la gente pueda prosperar y sentirse segura[2].
Posición ante la Deportación Masiva
La presidenta Castro también ha sido clara en su postura ante la posibilidad de deportaciones masivas de hondureños por parte del gobierno de Trump. En un mensaje dirigido a sus compatriotas, advirtió que si se concretan estas deportaciones, Honduras consideraría un cambio en sus políticas de cooperación con EE.UU., especialmente en el ámbito militar. Esto incluiría la posibilidad de cerrar la base militar estadounidense en Palmerola, que ha sido un punto de cooperación militar entre ambos países desde los años 80[5].
“Frete a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos”, enfatizó Castro. Esta postura refleja la importancia que Honduras otorga a la protección de sus ciudadanos y a la mantención de relaciones constructivas con EE.UU.[5].
Impacto en la Diáspora Hondureña
Las declaraciones de la presidenta Castro han generado reacciones diversas dentro de la diáspora hondureña en EE.UU. Mientras algunos apoyan su firmeza en defender los derechos de los migrantes, otros han expresado preocupación por las posibles consecuencias de un enfrentamiento con el gobierno estadounidense.
Los migrantes hondureños con negocios en EE.UU. han pedido a la presidenta Castro rectificar su accionar y velar por el bien de la población, señalando que las amenazas de gravar las remesas y cerrar la base militar podrían perjudicar significativamente a la comunidad hondureña en el extranjero. Las remesas, que representan alrededor del 25% del PIB de Honduras, son cruciales para el sustento de muchas familias hondureñas[4].
Cooperación y Desarrollo Económico
A pesar de las tensiones, la presidenta Castro ha reiterado su compromiso con la cooperación y el desarrollo económico mutuo. La relación entre Honduras y EE.UU. es vista como fundamental para la estabilidad y el progreso de ambas naciones. La delegación de congresistas estadounidenses ha expresado su intención de seguir trabajando juntos para abordar las raíces de la migración y promover la estabilidad en Centroamérica, lo que a su vez beneficia a EE.UU.[2].
En resumen, la presidenta Xiomara Castro ha dejado claro que Honduras está dispuesta a trabajar conjuntamente con EE.UU. para abordar los desafíos migratorios de manera ordenada y segura, mientras defiende firmemente los derechos y el bienestar de sus ciudadanos. Este enfoque busca fortalecer la histórica asociación entre ambos países y promover el desarrollo económico y la seguridad en la región.